Lo primero del día fue desayunar en el buffet del hotel, la dieta consistía en bacon, tortilla francesa, bollitos, tortitas,etc… es decir, que si no tenia grasa no lo comíamos. Después de sentirnos bien gorditos (como diría nuestro amigo Krasty) nos dirigimos a la presa Hoover, famosa por las películas de James Bond y Transformers. Pero al final fue misión imposible, ya que estaban en obras y después de avanzar 0,5 millas en 1 hora decidimos dar media vuelta.
Así que nos fuimos directos al famoso outlet de Las Vegas, donde las tarjetas echaron humo hasta 8 de la noche.
Después de dejar las compras en el hotel fuimos a dejar nuestro precioso coche al aeropuerto, la verdad es que aguantó como un campeón nuestros 3500 km más o menos.
Nuestro hotel.
De aquí nos vamos para el Strip, que es la calle donde están todos los hoteles más famosos de Las Vegas. A pesar de empezar a las 10 de la noche, terminados a las 2 de la madrugada de echar un pequeño vistazo, en definitiva, una locura!!